Una prosa sensata, un temor con sentido

Llevo rato presintiéndote
a pesar de que eres intermitente...
Pero oye, no te acerques demasiado.
No conviene. No es el momento.

Sé que quizás tenga lo que estás buscando
(y tú lo que yo necesito),
lo que tanto has esperado.
Pero no ahora. Estoy atada.

No te equivoques.
No hagas que desvíe mi camino
cuando todo finalmente está claro.
No fue fácil. No permitas que lo abandone.

No querrás complicar tu vida;
la mía ya lo está
pero no quiero desordenarla.
No sería justo.

Si das un paso en falso tendré que alejarme.
Y no quisiera. Eres agradable.
Muy agradable.

Sé que quizá nos conocimos en otra vida;
yo sé que te había visto antes... Mucho antes.
Y tú...  Tú has dicho con emoción que soy como de siempre.
¿Quién lo diría?...

No te acerques demasiado, niño.
No te equivoques,
o tendré que alejarme por una vez en silencio.

AndreínaLP